viernes, 16 de junio de 2017

GRANADA Y SU HISTORIA





Granada es una ciudad y municipio españolcapital de la provincia homónima, en la comunidad autónoma de Andalucía. Está situada en el centro de la comarca Vega de Granada, a una altitud de 680 m s. n. m., en una amplia depresión intrabética formada por el río Genil y por el piedemonte del macizo más alto de la península ibéricaSierra Nevada, que condiciona su clima.
ALHAMBRA





Estatua de Isabel la Católica recibiendo a Cristóbal Colón.





En ella se encuentra la sede del partido judicial número 3 de la provincia, la de la archidiócesis que lleva su nombre, así como las del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, Ceuta y Melilla, el Consejo Consultivo de Andalucía, el Consejo Escolar de Andalucía y el Colegio Notarial de Andalucía —compartida con Sevilla—. Granada alberga también la sede de diversas instituciones autonómicas de índole cultural y científica, como el Centro de Documentación Musical de Andalucía, la Biblioteca de Andalucía, el Instituto de Astrofísica de Andalucía, el Instituto Andaluz de Geofísica y Prevención de Desastres Sísmicos, el Instituto de Academias de Andalucía y el Centro de Estudios Escénicos de Andalucía —compartida con Málaga y Sevilla—. Además, es sede del Mando de Adiestramiento y Doctrina (MADOC) del Ejército de Tierra de las Fuerzas Armadas Españolas.





         
                                                


                                               


                                                           Real Chancillería de Granada




                          


EXLACE


                                    
                    La rendición de Granada por Francisco PradillaBoabdil frente a los Reyes Católicos.




Fue capital del Reino Zirí de Granada, durante el siglo XI, y del Reino Nazarí de Granada entre los siglos XIII y XV. Tras la toma de la ciudad por los Reyes Católicos, se mantuvo como capital del Reino castellano de Granada, que ya era una simple jurisdicción territorial y que se mantuvo hasta 1833, momento en que se produjo una nueva división provincial en España, todavía vigente. Su escudo municipal ostenta los títulos de «Muy noble, muy leal, nombrada, grande, celebérrima y heroica ciudad de Granada».




         
TUMBA DE LOS REYES CATÓLICOS



Fue capital del Reino Zirí de Granada, durante el siglo XI, y del Reino Nazarí de Granada entre los siglos XIII y XV. Tras la toma de la ciudad por los Reyes Católicos, se mantuvo como capital del Reino castellano de Granada, que ya era una simple jurisdicción territorial y que se mantuvo hasta 1833, momento en que se produjo una nueva división provincial en España, todavía vigente. Su escudo municipal ostenta los títulos de «Muy noble, muy leal, nombrada, grande, celebérrima y heroica ciudad de Granada».
                                 



                                                                                                  




La Alhambra es una ciudad palatina andalusí situada en Granada, en la comunidad autónoma de AndalucíaEspaña. Consiste en un conjunto de palacios, jardines y fortaleza (alcázar o al-qasr القصر) que albergaba una verdadera ciudadela dentro de la propia ciudad de Granada, que servía como alojamiento al monarca y a la corte del Reino nazarí de Granada. Su verdadero atractivo, como en otras obras musulmanas de la época, no solo radica en los interiores, cuya decoración está entre las cumbres del arte andalusí, sino también en su localización y adaptación, generando un paisaje nuevo pero totalmente integrado con la naturaleza preexistente. En 2015 fue uno de los monumentos más visitados de España, por detrás del Templo Expiatorio de la Sagrada Familia de Barcelona,2 recibiendo la cifra histórica de 2 474 231 visitantes.3





                                                
                               
Fachada sur del Palacio de Carlos V, diseñado por Pedro Machuca.
                                                     

                                                                         
La Alhambra se levanta sobre la colina de la Sabika, uno de los puntos más elevados de la ciudad de Granada. Este emplazamiento buscaba una situación estratégica defensiva y a la vez transmitir un claro símbolo, donde la cima del poder es muy perceptible para el resto de la ciudad, una ubicación escogida para ser contemplado.4 La ocupación de esta colina se remonta a tiempos romanos. Del año 899 datan las primeras referencias escritas de un emplazamiento militar en la zona. A mediados del siglo XI, al convertirse Granada en capital del reino de Taifa, bajo la dinastía ziríes, se ampliaron las construcciones.
Patio de los Leones
La Alhambra pasó a ser residencia real, a partir de 1238, con la llegada al poder de Muhammad ibn Nasr, primer monarca del Reino nazarí de Granada, para lo que creó un abastecimiento de agua propio. Las construcciones más lujosas de los palacios que hoy se conservan, el palacio de Comares y de los Leones, proceden del siglo XIV. El conjunto tiene una forma alargada e irregular adaptada a la forma de la colina sobre la que se levanta. Su longitud es de 740 m. y su anchura varía entre los 180 y los 40 metros.5
  
                   EL ÁRBOL DE LA VIDA



               PATIO DE LOS LEONES



   

                   Vista panorámica del interior del Palacio de Carlos V.







                        
                                                        VÍDEO VIRTUAL DE LA ALHAMBRA



                                      

                                                       Patio de los Leones

                                             





                           





                    


















       







  





                                                                   











martes, 28 de junio de 2016



POEMAS  DE  FEDERICO  GARCÍA  LORCA 




"Humilde homenaje a Jorge Luis Borges"
Se extingue la luz brillante del amarillo sol tras 

Su sien plateada de filósofo solitario. Las sombras,

Inquietas, dibujan los amores inciertos del mañana. 



Descansa en el viejo banco del jardín mustio

Y silencioso. Observando estremecido el profundo

Color desgastado de la blanca rosa.

Quizás esa rosa, ahora toda oscura, que reposa 

Tristemente dichosa (pero a la vez cambiante)

Sobre el mundo de lo sensible

Sea tan solo una vana imitación, una simple copia 

Mal lograda de la verdadera rosa única.

Aquella que es la rosa de todas las rosas.

La rosa perfecta. Su querida flor platónica.













Mi corazón oprimido 
Siente junto a la alborada 
El dolor de sus amores 
Y el sueño de las distancias. 
La luz de la aurora lleva 
Semilleros de nostalgias 
Y la tristeza sin ojos 
De la médula del alma. 
La gran tumba de la noche 
Su negro velo levanta 
Para ocultar con el día 
La inmensa cumbre estrellada. 

¡Qué haré yo sobre estos campos
Cogiendo nidos y ramas
Rodeado de la aurora
Y llena de noche el alma!
¡Qué haré si tienes tus ojos
Muertos a las luces claras
Y no ha de sentir mi carne
El calor de tus miradas!
¿Por qué te perdí por siempre
En aquella tarde clara?
Hoy mi pecho está reseco
Como una estrella apagad







Garcia Lorca
         

            






Cuando sale la luna
se pierden las campanas
y aparecen las sendas
impenetrables.
Cuando sale la luna,
el mar cubre la tierra
y el corazón se siente
isla en el infinito.
Nadie come naranjas
bajo la luna llena.
Es preciso comer
fruta verde y helada.
Cuando sale la luna
de cien rostros iguales,
la moneda de plata
solloza en el bolsillo.

  







Casa Lorca







































Arbolé, arbolé
seco y verdé.


La niña del bello rostro
está cogiendo aceituna.
El viento, galán de torres,
la prende por la cintura.
Pasaron cuatro jinetes
sobre jacas andaluzas
con trajes de azul y verde,
con largas capas oscuras.
«Vente a Córdoba, muchacha».
La niña no los escucha.
Pasaron tres torerillos
delgaditos de cintura,
con trajes color naranja
y espadas de plata antigua.
«Vente a Sevilla, muchacha».
La niña no los escucha.
Cuando la tarde se puso
morada, con luz difusa,
pasó un joven que llevaba
rosas y mirtos de luna.
«Vente a Granada, muchacha».
Y la niña no lo escucha.
La niña del bello rostro
sigue cogiendo aceituna,
con el brazo gris del viento
ceñido por la cintura.

Arbolé arbolé
seco y verde.


La niña del bello rostro 



     


                      
             


                                                                            I   

Salen los niños alegres
De la escuela,
Poniendo en el aire tibio
Del abril, canciones tiernas.
¡Que alegría tiene el hondo
Silencio de la calleja!
Un silencio hecho pedazos
por risas de plata nueva.

II

Voy camino de la tarde
Entre flores de la huerta,
Dejando sobre el camino
El agua de mi tristeza.
En el monte solitario
Un cementerio de aldea
Parece un campo sembrado
Con granos de calaveras.
Y han florecido cipreses
Como gigantes cabezas
Que con órbitas vacías
Y verdosas cabelleras
Pensativos y dolientes
El horizonte contemplan.

¡Abril divino, que vienes
Cargado de sol y esencias
Llena con nidos de oro
Las floridas calaveras!
                                                                       
                                     






García Lorca  de pequeño






La  casa de Bernarda Alba




¿De dónde es este gallo?
¡Soy el gallo de don Alhambro!
Pues ¡que se vaya! gritaron todos.
Me he renovado para venir en busca vuestra y poder subir al título que tanto ansío y para el que fui creado.
A mí, el título que me gusta es El Suspiro del Moro, dije yo.
Y a mí, Romeo y Julieta, dijo otro.
Y a mí, Vaso de Agua, repitió una vocecita.
¡Señores, por Dios! gritó el gallo. Yo no pido que tengáis la ideología de don Alhambro; también yo he cambiado de parecer, pero no me rechacéis por mi historia. Eso no lo puedo resistir. Aquí no se puede hacer nada sin contar con la historia. Soy bello. Anuncio la madrugada y como lema seré siempre insustituible.
Hubo una discusión violentísima, en la que el gallo suplicaba de manera tierna.
Basta, amigos míos, dije enérgicamente. Bajo mi responsabilidad. ¡Sube al título!
Abrimos el balcón y el gallo ascendió al título con todas sus plumas encendidas. Ya en la caña del título, nos saludó a todos de manera inefable. Manera de agua y jacinto. Poema de quien rompe una guitarra sobre el mar del amanecer. Dalia en el olivo y bosque en mano. Juego y mentira.
Hemos celebrado la ascensión del gallo al título de esta revista haciéndole bordar cuatro gallinas de seda rutilantes, para que su pico guste ardiente fruta de zigzag en la evocadora madrugada oscura de la imprenta. Mientras mis amigos aplaudían, yo escuchaba emocionado la sonrisa de don Alhambro, que me llegaba envuelta en el denso algodón en tronco de la sepultura.
Canta, gallo, regallo y contragallo.
Canta seguro bajo tu sombrerito de llamas, porque una de tus gallinas puede ser muy bien la gallina de los huevos de oro.
...ooo